Fondue para cenar, le entregó la llave de su departamento, deseaba que vivieran juntos, cada vez que la tocaba su piel o la besaba lo hacía sentir como un volcán a punto de hacer erupción, ninguna mujer había logrado ese efecto en Karl, pensaba que mientras más cerca la tuviera, podría controlarla, alejar al amigo de ella…
La lencería de encaje que vestía ella salió volando, se hicieron gozar uno al otro, más de una ocasión, hasta quedarse dormidos, abrazados, a la mañana siguiente se despertó Jessie antes de que sonara el despertador de Karl, se metió a bañar, tenia hambre, ya quería pedir el desayuno, cuando salió de la ducha, él no estaba en la cama, de pronto, escuchó que recibía el desayuno, al verla sonrió, se “buenos días princesa” “me baño rápido”, “te espero a desayunar, solo tomaré café, no tardes”, se sentó tomó un vaso con jugo…
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By the Mighty Mumford 